La piel tiene memoria o por qué aparecen manchas si te has protegido este verano

Ahora que, tristemente para muchos, los recuerdos del verano quedan cada vez más lejos, ocurre lo mismo con ese tono bronceado que logramos. Y, ¡oh!, de repente, nos damos cuenta de que en nuestro rostro han aparecido manchas que antes no estaban. ¿Cómo es esto posible si nos hemos protegido de los rayos solares? La respuesta es sencilla: nuestra piel tiene memoria.

Seguro que has escuchado la frase de “la piel tiene memoria” de forma frecuente y es que es una de las advertencias más recurrentes de los especialistas para concienciarnos de la importancia que tiene el cuidarla y protegerla. Esta memoria tiene su origen en las células, las cuales tras años de acumular daños (sol, tabaco, contaminación) empiezan a cambiar, creando así desde la aparición de manchas o arrugas prematuramente o, en casos más extremos, cáncer de piel. Estas consecuencias no son inmediatas, sino que suelen aparecer años más tarde después de que se produjese, pro ejemplo, una quemadura solar.

La exposición solar tiene muchos beneficios para nuestra salud y bienestar, aumenta el ánimo, produce vitamina D, ayuda a fortalecer los huesos… Pero, como todo, tiene sus consecuencias negativas como enfermedades, quemaduras, fotoenvejecimiento, etc. Esto se debe a las radiaciones electromagnéticas que produce el sol y que provocan daños irreparables en la piel. Cuando nos bronceamos, nuestra piel cambia el tono como mecanismo de defensa, la cual puede desgastarse por el daño continuo y no funcionar como debería.

Lamentablemente, las manchas que aparecen por este proceso, no desaparecen si dejamos de exponernos al sol. La solución es tratarlas y prevenir la aparición de nuevas mediante productos cosméticos despigmentantes o la realización de tratamiento estéticos y médico estéticos.

Aunque si se ha demostrado efectividad en los productos cosméticos, estos requieren constancia y un tratamiento a largo plazo para conseguir obtener los primeros resultados. Por eso, siempre recomendamos que estos sean un complemento de un tratamiento estético. En cuanto a éste, existen multitud de opciones y métodos para la eliminación de manchas. Los más efectivos son los peeling médicos, como el tratamiento Biomelanin, ya que son personalizables a cada tipo de piel, elimina las manchas superficiales y aclara las profundas. Este tipo de tratamiento también se puede combinar posteriormente con láser y sus correspondiente cosméticos para el cuidado en casa.

Al margen del tratamiento de las manchas, es muy importante la prevención de su aparición. De ahí que siempre insistamos en el cuidado diario, la limpieza del rostro y la realización de algún tratamiento de forma regular para actuar de manera más profunda y reparar los daños que se van acumulando. Una buena opción para proteger y recuperar la vitalidad de la piel después del verano es un tratamiento con vitaminas. Este se encargará de prepararla para el frío, igualar el tono y aportan nutrientes necesarios. De igual modo, nunca nos olvidemos de aplicarnos fotoprotector facial incluso en los días más nublados y fríos. 

Tratamientos recomendados:

• Biomelanin. Tratamiento médico de ultima generación, aplicado por el Dr. Cruz, que reduce manchas faciales superficiales y profundas.
• Purewhite. Tratamiento estético global que regenera y unifica el tono de piel, disminuye la intensidad de la pigmentación e interrumpe el flujo de melanina.
• Energy Vitamin. Tratamiento diseñado para aportar un extra de nutrientes a pieles apagadas o desvitalizadas. Reduce líneas de expresión, elimina el aspecto cansado, unifica el tono y textura de la piel, y acentúa el resplandor natural.